Mucho antes de que Estados Unidos entrase en la Segunda Guerra Mundial, en 1939, la Historia de la bomba atómica dio comienzo cuando el Presidente Franklin Delano Roosevelt invirtió 2.000 millones de dólares en la investigación de la energía nuclear.
Albert Einstein, científico y autor de la teoría de la relatavidad, había logrado realizar importantes descubrimientos sobre el uranio y el plutonio, aunque fuera del ámbito militar. Sin embargo después del 7 de Diciembre de 1941, cuando Estados Unidos entró en la Segunda Guerra Mundial tras el ataque japonés sobre Pearl Harbor, Roosevelt señaló que la energía atómica fuera investigada como un proyecto militar más.
Little Boy fue el nombre con el que bautizaron los americanos a la bomba lanzada en Hiroshima. La bomba de uranio-235 de 4.400 kilogramos de peso, 3 metros de longitud, 75 centímetros de diámetro y una potencia explosiva de 16 kilotones, 1,600 toneladas de dinamita. Explotó a las 8:15 del 6 de agosto de 1945 a una altitud de 600 metros sobre la ciudad japonesa, acabando con la vida de aproximadamente 140.000 personas.